La Unión Europea acordó a finales de diciembre, en su último Consejo de Ministros de Agricultura y Pesca del año, los Totales Admisibles de Capturas (TAC) y las cuotas de pesca para este año 2024, que como suele ocurrir trae resultados dispares según las zonas y las especies y provoca reacciones encontradas.

Las mayores subidas en las cuotas de pesca son para la merluza sur, que obtiene su cuota más alta de los últimos veinte años, rape, bacalao, gallo y bacaladilla. La situación más delicada, en cambio, se concentra en el Mediterráneo, donde gran parte de sus especies están en riesgo, por lo que no se rige por cuotas de pesca sino por días de faena.

Una de las grandes novedades es que algunas especies pasan a tener cuotas bianuales, o en algunos casos trianuales, como cigala, lenguado, abadejo, solla y merlán.

El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, destacó que son unos resultados “muy buenos” para nuestra flota pesquera, mientras que desde las Consejerías correspondientes de Andalucía y Murcia la valoración era bastante negativa. Para las organizaciones medioambientales, los resultados son moderados ya que abogaban por un mayor esfuerzo para evitar la sobrepesca.