Contar con un completo seguro de hogar es absolutamente imprescindible en la sociedad actual. Aunque sólo es obligatorio si tienes una vivienda hipotecada, la ley te obliga a suscribir un seguro de daños, es recomendable tenerlo en todos los casos, ya que en el caso de que se produzca un siniestro (como un robo, una inundación o un incendio), podrás recibir una ayuda con los gastos de reparación.
Una de las dudas más frecuentes es si debemos contratar el seguro de hogar con el banco con el que tengamos la hipoteca, y la respuesta es no, podemos elegir con absoluta libertad la aseguradora con la que queremos contratar nuestro seguro de hogar, a pesar de que los bancos están “obligando” a contratar el seguro con ellos.
¿Qué ocurre si sólo soy el inquilino de la vivienda y vivo de alquiler? Pues lo ideal sería que contrataras un seguro al menos para el contenido, que cubra tus objetos personales en caso de que se produzca algún siniestro. Si eres propietario, también es recomendable tener un seguro para el continente.
Un aspecto muy importante en el seguro de hogar es calcular correctamente el valor de la vivienda, ya que el valor que nos reembolsará el seguro irá en función de lo que hayamos declarado. En el caso del continente, irá en función de los metros cuadrados construidos, mientras que en el contenido hay que hacer un cálculo lo más exacto posible, sin pasarse (sobreseguro) ni quedarse corto (infraseguro).
Lógicamente, el seguro de hogar que contratemos a nivel particular es independiente del seguro de la comunidad, que nunca cubrirá lo que ocurra en tu vivienda a no ser que el origen sea comunitario.
Lo ideal es contratar una póliza multirriesgo, que además de solucionar los problemas que ocurran en tu vivienda, incluye coberturas de Responsabilidad Civil, para hacer frente a los daños que se produzcan en otras viviendas. No obstante, las opciones son múltiples y también puede ser interesante que el seguro de hogar incluya algunas de las reparaciones más habituales en las viviendas: fugas de agua, rotura de cristales, problemas eléctricos, etc.
A partir de ahí, y dependiendo de las necesidades y posibilidades de cada uno, hay opciones como un servicio de montaje de mobiliario, la reparación remota de problemas de hardware y software o la recuperación de datos.
El seguro de hogar se suele renovar anualmente, y siempre podrás ampliar las coberturas en caso de necesidad. ¿Necesitas asesoramiento? No dudes en consultar con nuestros expertos.